Tecnología Panasonic en la granja solar El Ángel, de El Salvador
Recientemente, Panasonic Corporation informó sobre su participación en la nueva granja solar El Ángel, ubicada en El Salvador, uno de los primeros proyectos de energía verde en Centroamérica, en el que se aprovecha la tecnología fotovoltaica y los servicios de la empresa japonesa. Se trata de un desarrollo de uno de los principales conglomerados empresariales centroamericanos, Grupo Simán, el cual obtuvo tres contratos para proveer de energía a las diferentes compañías de la red pública de energía eléctrica de El Salvador.
Gracias a su experiencia, tecnología y presencia regional, Panasonic fue seleccionada por Grupo Simán para participar desde el diseño del proyecto hasta la instalación, supervisión y mantenimiento de cuatro sistemas, tres con capacidad de 500 kW y uno más de 1 MW. Los tres primeros están dedicados a la generación y suministro de energía eléctrica de los contratos asignados vía licitación, mientras que el cuarto sistema produce la energía que satisface las necesidades de un contrato directo con una de las compañías eléctricas salvadoreñas.
Para el establecimiento de la granja solar El Ángel, Grupo Simán ha aprovechado el techo de un gran almacén de su propiedad, localizado en la zona de Apopa en San Salvador, y una pequeña área en su interior, en la que se encuentra el centro de operación. El proyecto, que requirió cinco meses de labores de instalación, consta de 10 mil 19 paneles fotovoltaicos de 255 W cada uno y 99 inversores, todos con tecnología Panasonic. Su puesta en marcha inició en marzo de 2015 y desde mayo de este mismo año la operación se realiza de manera completa.
Mediante el uso de sistemas de monitoreo en línea, el personal de El Ángel puede supervisar fácilmente la operación de la granja solar. Todos los paneles e inversores son controlados de manera individual, lo que agiliza la detección puntual de posibles fallas, anticipa labores de mantenimiento y asegura tanto el desempeño como la productividad de la granja.
Además de proveer parte de la energía eléctrica necesaria en El Salvador, el proyecto contribuye a disminuir las emisiones de CO2 y dar una muestra de aprovechamiento de espacio y recursos para otras empresas de la región.