Proyecto Ceboruco energía geotérmica en Nayarit

En su primera fase, ofrecerá un potencial de generación de 125 MW, con lo que abastecerá de electricidad a más de 100 mil hogares y comercios nayaritas.

Por Antonia Tapia.

México tiene un gran potencial en energía geotérmica estimada en 40 mil MW y cuenta, a lo largo y ancho de su territorio, con 20 zonas geotérmicas analizadas. Sin embargo, hasta el momento su capacidad instalada es de aproximadamente 1 mil MW. Hace tres años, la empresa mexicana Mexxus Drilling International, dedicada a la perforación y reparación de pozos geotérmicos, comenzó negociaciones con la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para la instalación del primer campo geotérmico privado del país, que se localizará en la zona del volcán Ceboruco, en Nayarit.

La energía geotérmica permite aprovechar el calor del interior de la tierra para generar electricidad. En el mundo existe aproximadamente un potencial de 10.7 GW de energía geotérmica instalada y se estima que para 2015 la capacidad supere los 18 mil MW.

La generación de electricidad a través de esta fuente de energía comenzó a utilizarse a principios del siglo pasado en la región de la Toscana, Italia, mientras que los primeros intentos en el país se registraron en la década de 1960 en Hidalgo y Michoacán.

Sin embargo, la investigación y el desarrollo de tecnologías que permitan aprovechar este tipo de energía son recientes. Lo mismo sucede con la infinidad de recursos geotérmicos que aún no han sido explotados.

En la actualidad, México ocupa el cuarto lugar en generación de electricidad a través de energía geotérmica, luego de Estados Unidos, Filipinas e Indonesia. Su potencia instalada es de aproximadamente 1 mil MW, y existen cuatro campos geotérmicos en funcionamiento: Cerro Prieto, Baja California (720 MW); Los Azufres, Michoacán (188 MW); Los Humeros, Puebla (40 MW), y Las Tres Vírgenes, Baja California Sur (10 MW).

Al respecto, Constructor Eléctrico dialogó con el ingeniero Carlos García Ramírez, Ceo de Mexxus Drilling International, quien explica que actualmente el potencial de este tipo de energía se está aprovechando parcialmente, ya que se requieren grandes inversiones para explotar su potencial.

“Todo recae en la Comisión Federal de Electricidad (CFE), quien se ve obligada a invertir en fuentes de generación de otro tipo, como la hidráulica, la eólica, la solar o la termoeléctrica. Aunque actualmente se ha abierto el panorama a la inversión privada, como sucede con el Proyecto Ceboruco, el primero bajo esta modalidad en el país”.

La energía geotérmica ofrece grandes ventajas competitivas: es una fuente de energía renovable que, a diferencia de la eólica o la solar, no depende de los factores climáticos para su generación; su costo es competitivo, aproximadamente 3.1 y 13 centavos de dólar por kilowatt, y su impacto sobre el medioambiente no es significativo.

“El factor de planta rebasa el 90 por ciento, mientras que la solar y la eólica difícilmente llega al 40 por ciento. En pocas palabras, es más barata y no contamina”, indica el ingeniero García Ramírez, quien agrega que el precio estimado de este tipo de energía, en el caso de un proyecto privado en México –aunque dependerá de la negociación que se efectué con los off-takers o con la propia CFE–, se ubicará sin duda por debajo de las tarifas de otras fuentes.

Proyecto Ceboruco
Nayarit se localiza sobre el Cinturón de fuego del Pacífico, región que también comprende Jalisco y Michoacán, que se caracteriza por una fuerte actividad sísmica y volcánica.

Hace años, la empresa Mexxus Drilling International se dio a la tarea de tocar puertas, inclusive en otros países, como Colombia y Nicaragua, para obtener la concesión o permiso para generar electricidad a partir de energía geotérmica. Finalmente, en 2013, tras tres años de esfuerzos, expresa el ingeniero García Ramírez, la CFE le concedió a la empresa el primer título otorgado en el país a una empresa privada para el desarrollo de un proyecto geotérmico en la zona donde se ubica el volcán Ceboruco (sureste de Nayarit), en la parte occidental de la Faja Volcánica Transmexicana, a 2 mil 280 metros sobre el nivel del mar. En la iniciativa, también participa la empresa Reykjavik Geothermal, de Islandia, la cual ha colaborado con el desarrollo de proyectos geotérmicos en más de 30 países.

“El proyecto Ceboruco consiste en generar energía renovable a costos más accesibles bajo la modalidad Independent Power Producer (IPP), lo cual permite generar energía a precios competitivos”.

En el proyecto Ceboruco intervienen diversos organismos federales, como la CRE; la CFE; el Instituto Nacional de Antropología e Historia; la Comisión Nacional del Agua; la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales; el Gobierno Estatal y el Municipal.

La iniciativa comprende distintas fases: estudios de prefactibilidad; gestoría y tramitología; movilizaciones de equipo, perforaciones, construcción de obra civil, eléctrica y mecánica; pruebas y generación.

Actualmente, el proyecto se encuentra en la etapa final de gestoría y tramitología, y en la etapa inicial de movilización de equipo. Se espera que entre en funcionamiento en 2017.

“El área que abarca el proyecto es de 484 km2, sin que esto signifique que toda esa zona sea de potencial efectiva. Se hicieron estudios con científicos islandeses especializados en la materia y se determinaron zonas de producción más pequeñas dentro de esta área. Nuestro proyecto tendrá un área de 9 hectáreas, donde se instalará la planta, mientras que la zona de perforación posiblemente llegue a 200 hectáreas. Las temperaturas esperamos que ronden los 270 o 300 grados Celsius, a unos 3 mil metros de profundidad, y el potencial de la primera zona es de 125 MW”.

En relación con la planta, el ingeniero García Ramírez afirmó que se está trabajando en el diseño de las turbinas: “Tendremos que esperar hasta que se genere el primer pozo productor para determinar los parámetros que comprenderán, como la aleación del material que tendrán, ya que todo depende del tipo de vapor”.

Este proyecto, para los primeros 100 MW, cuenta con una inversión aproximada de 349 millones de dólares y, según el CEO de Mexxus Drilling International, proveerá energía limpia a bajo costo. Además, puede resultar un gran detonante socioeconómico para Nayarit.

García Ramírez precisa que los retos y desafíos son muchos; sin embargo, resalta el respaldo del personal técnico de la compañía, el cual es especialista en la materia. Del mismo modo, destaca el apoyo de las autoridades municipales, estatales y federales.

“Es importante puntualizar el esfuerzo del gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, quien ha sido gestor e impulsor en conjunto con su gabinete para el buen desempeño de nuestros esfuerzos”, indica.

Al preguntarle sobre la posibilidad de que la compañía desarrolle otros proyectos similares, el ingeniero García Ramírez sostiene que por ahora se encuentran enfocados al ciento por ciento en el proyecto de Ceboruco, con el cual se sienten sumamente emocionados y contentos, pero con perspectivas realistas, debido al gran desafío que tienen en puerta. “Aunque –aclara–, sin dejar de pensar en otros escenarios”.
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