LíderesNegocios

Cogenerar tiene sentido

Por Irayda Rodríguez / Fotografías: Constructor Eléctrico

Al frente de la apuesta de IGSA por las energías limpias está Kevin Piccolo, quien en fechas recientes cumplió dos años como Director de la División de Cogeneración y Energía. Administrador de Empresas de profesión y con una firme vocación por la docencia, que en un futuro planea retomar, inició su carrera profesional en el sector eléctrico en su natal Venezuela. “Comencé siendo administrador de Contratos de Proyectos EPC. Luego tuve la oportunidad de ser gerente de Proyecto en ABB, empresa que me trajo a México hace 15 años, cuando había un boom de infraestructura eléctrica para la Comisión Federal de Electricidad, principalmente en líneas de transmisión y subestaciones. Después, manejé algunos proyectos con Iberdrola y fui responsable de todos los productos de la parte de Energía en IUSA, hasta que IGSA me llamó para ser parte de la compañía”.

Piccolo define su labor como “un mix entre ser un contratista y ser un utility de generación eléctrica y venta de este servicio”, en la que destacan proyectos tanto para el sector gobierno como clientes industriales. “Nos encargamos principalmente de hacer proyectos de infraestructura eléctrica. Tenemos dos maneras de trabajar: podemos participar en licitaciones con proyectos EPC, con base en una ingeniería básica, que posiblemente sea suministrada por el cliente o con otra modalidad de negocio, en donde identificamos clientes que tienen necesidades de energía, no solamente eléctrica sino térmica, y entonces colocamos procesos de cogeneración, donde, con el consumo de un combustible, generamos dos tipos de energía. En este tipo de proyectos podemos hacer plantas de cogeneración para un tercero y también nos encargamos del servicio de venta de energía como Outsourcing, eso significa que invertimos en la planta de generación o cogeneración. La planta es propiedad de IGSA y lo que hacemos es vender la energía eléctrica o térmica con inversión propia, normalmente a un plazo de 15 a 20 años. Sin invertir un solo centavo, nuestros clientes pueden disponer de energía eficiente y limpia, con un descuento sobre las tarifas del mercado”.

La fortaleza de la cogeneración es que con una planta se tiene la posibilidad de 95 a 98 % de horas anuales de producción»

Constructor Eléctrico (CE): ¿Qué retos ha asumido junto con la Dirección de Cogeneración y Energía?
Kevin Piccolo (KP): Cuando llegué estaban terminando la construcción de la segunda planta de IGSA y me tocó la responsabilidad de ponerla en servicio. Por la necesidad de energía térmica del cliente, se construyó en paralelo a la planta. Estuvimos trabajando en la modalidad en isla, donde la planta de cogeneración está conectada a la carga ancla, que es de nuestro cliente base y tuvimos que hacer la coordinación para inyectar la energía excedente a la red nacional de transmisión. Esta integración la realizamos durante los cambios de la Ley Energética y tuvimos varios contratiempos por la incertidumbre que una reforma de ese tamaño trae consigo. Fue un aprendizaje complejo pero, hace un año que estamos conectados a la red e inyectamos la energía para colocarla en diferentes clientes del sector, con un aprovechamiento de 95 por ciento.

CE: ¿Cómo ha sido el proceso de adaptación de la compañía ante la Reforma Energética?
KP: La Reforma Energética se presenta ambiciosa, sin embargo, considero que los tiempos que se determinaron para ello fueron muy cortos. Nuestras dos plantas cuentan con el permiso legado otorgado por la CRE previo a la Reforma, esto significa que pertenecen a la antigua ley, por lo que tenemos un amparo transitorio otorgado por la nueva legislación. Hoy en día, el mercado eléctrico mayorista todavía no está maduro y continúa la incertidumbre sobre los precios del mercado, por ello nos hemos mantenido con nuestros permisos y con contratos bilaterales entre particulares, pero tenemos un portafolio de proyectos de nuevas empresas de generación o de nuevos proyectos con varios clientes que van a desarrollarse en el marco de la nueva ley, nos estamos documentando y la estamos conociendo, para actuar hacia adelante.

CE: ¿Cómo asumir un cargo directivo como éste ante los cambios de legislación?
KP: Como directivo, tienes que estar informado de los sucesos actuales, es necesario leer mucho. En el tema de la Reforma Energética todo lo que conocías cambia rápidamente e, incluso, deja de tener el mismo valor de un mes para otro. Desde que asumí esta dirección, han sido años muy vivos, en los que las leyes, los manuales y lineamientos han cambiado, ha sido tiempo de mucho aprendizaje para amoldarnos a ello. El éxito está en lograr cambiar, en introducirse a ese flujo de transiciones y no resistirse a ellas, participar y colaborar directamente en lo que está sucediendo, si no te quedas atrás. IGSA tiene la ventaja de que viene de un régimen anterior, que ya estaba en el negocio de la energía desde hace varios años, a diferencia de muchos competidores, y por ello cuenta con el know how, tanto técnica como legalmente para satisfacer las necesidades de los clientes y el mercado.

CE: Las empresas en México también están experimentando una renovación…
KP: Totalmente. IGSA es una empresa familiar que está viviendo un proceso de sucesión entre padre e hijo. Cuando ocurre algo así, es normal que haya cierta resistencia al cambio; sin embargo, lo estamos consiguiendo satisfactoriamente. Santiago Paredes Ojeda, el director General, ha mostrado buen ánimo y mucho sentido de liderazgo. Se han dado restructuraciones lógicas en la compañía; de hecho, mi nombramiento es un ejemplo de ello.

Con todo lo que está sucediendo, lo que realmente estamos haciendo es fortalecer a la empresa y alistándola para los retos del futuro. Tenemos prestigio por nuestra trayectoria con las plantas eléctricas; sin embargo, también estamos creciendo en otras unidades. Nuestra infraestructura es relativamente nueva, ya que la planta más antigua lleva cuatro años en funcionamiento, pero es una alternativa para los diferentes sectores de la industria, con el fin de bajar sus costos de producción con energía confiable y menos contaminante.

CE: ¿En qué punto se encuentra y hacia dónde se dirige la cogeneración en el país?
KP: Es una parte del sector que va a tomar mucha fuerza. Anteriormente, la legislación permitía que hubiera proyectos de cogeneración, de autoabasto donde los clientes tenían que ser socios de la planta, sin embargo, la apertura dada por la Reforma Energética nos quita ese primer candado.

El tema de la cogeneración va a crecer porque con las redes de distribución de gas que se están haciendo actualmente, vamos a tener combustible económico para este tipo de plantas y poder disminuir los costos de la energía. Para 2018, la nueva legislación prevé que al menos 5 por ciento de su energía provenga de fuentes limpias, esto nos beneficia ya que con ello podemos entregarle a nuestros clientes los CEL que requieren. Sin duda, participar en un mercado donde los diferentes clientes estén asociados a la cogeneración o entregarles los CEL que requieren va a hacer que nuestro sector consiga más peso.

CE: Es ese sentido, ¿la cogeneración puede conducirnos a la autonomía energética?
KP: No considero que nos lleve a una autonomía, porque es un proceso más que ayuda a colocar energía donde hay combustible, principalmente gas natural. Simplemente va a ser otro tipo de tecnología para la industria donde tecnologías como la hidroeléctrica, de ciclo combinado, solar y eólica van a seguir conviviendo. La fortaleza de la cogeneración es que con una planta se tiene la posibilidad de 95 a 98 por ciento de horas anuales de producción. Esa es la diferencia con los parques eólicos o los sistemas de celdas solares que, aunque son fuentes renovables, son intermitentes.

CE: ¿Qué casos de éxito han consolidado a la división que encabeza?
KP: La central IGSAPAK representa uno. Había cierta incertidumbre, pues el proceso es diferente cuando conoces la operación y las necesidades de tus clientes, a diferencia de este proyecto donde eso no existía. Todo fue conforme a la teoría y con base en eso se hizo el diseño para lograr el objetivo en tiempo y en forma.

El caso de la planta Tlalnepantla Cogeneración, que con cariño llamamos “Tlaco”, también es muy exitosa. Fue la primera planta que construimos en el predio del cliente y, por los espacios reducidos, cuenta con varios niveles de altura, tanto subterráneos como hacia arriba. Esto con el fin de poder colocar todo para el proyecto de cogeneración, incluyendo dos turbinas con sistemas de plantas de tratamiento de aguas y compresores de gas que logramos hacer con ingeniería de detalle muy importante para cuadrarnos a los espacios físicos.

CE: ¿Cuál es el balance de su división y qué proyectos hay en puerta a corto y mediano plazos?
KP: Uno de nuestros objetivos es mantener las centrales a su máxima capacidad. La central de IGSAPAK se pudo conectar a la red en marzo, el cliente ancla se está llevando 20 por ciento de la capacidad de la planta; sin embargo, tenemos contratos firmados y estamos solicitando permisos a la CRE para añadir nuevos socios, esto haría que, de aquí a octubre, la central llegue a 90 por ciento de su capacidad.

Para el caso de los nuevos proyectos, éstos se han frenado un poco por la incertidumbre de la Reforma Energética. Hemos visto en las subastas de energía que los precios están muy bajos. No obstante, como división, pensamos que vamos a poder cerrar este segundo semestre con dos proyectos nuevos.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba